¿Qué valor le damos al trabajo y la responsabilidad del pediatra firmante?, ¿y a la prevención? ... porque de eso justamente se trata.
Muchos niños presentan problemas de atención, son distraídos, lentos, no se concentran, están retraídos, no participan activamente de las actividades deportivas, o simplemente no llegan a completar la tarea de clase. En realidad, muchas veces se trata de nenes que presentan algún problema de visión, audición o alguna alteración traumatológica que no les permite desarrollar a pleno su potencial.
Aquí es donde la tarea del pediatra toma un rol importantísimo en lo que se refiere a "detectar" pequeños problemas que, corregidos a tiempo, ayudan a lograr un buen desempeño con calidad de vida.
Dejamos en otro contexto a los niños que sí tienen alguna caracteropatía y deben ser tratados por un especialista. En estos casos es fundamental también la colaboración del docente.
En resumen, debemos tomar conciencia y entender que un ideal nivel de prevención lo logramos entre todos: papás, docentes y pediatras, para lograr la detección precoz de algún tipo de déficit o alteración que, tratado a tiempo, favorezca las posibilidades de tener un excelente año escolar.