Cómo pasar el invierno con buena salud
El invierno trae cambios en tu rutina, y algunos de ellos pueden ser negativos para la salud. ¿Cómo podés cuidarte durante las temperaturas bajas?
Hace muchísimo frío en la calle, estás llegando a tu casa y en lo único que pensás es en tomar un buen café para más tarde comer un plato caliente bien cargado y acostarte a ver tele o leer. Es normal, a todos nos pasa, ¿pero es esta la mejor manera de cuidar tu cuerpo?
El invierno y la salud
Con los climas fríos, es normal que cambiemos nuestra rutina en muchos aspectos. Sin embargo, es muy importante que nos organicemos para que estos cambios no sean malos para nuestra salud. Hay tres cambios habituales que solemos hacer en invierno y que pueden afectar nuestra salud:
• El sedentarismo, o en otras palabras, la falta de ejercicio.
• Una alimentación con altos contenidos de grasa y con pocas verduras y vegetales.
• El hacinamiento, es decir, cuando varias personas comparten un espacio cerrado.
Sedentarismo
Cuando entrás en un ambiente calentito, es razonable que no quieras salir a la calle nuevamente. Pero esto puede ser muy malo para tu bienestar si supone que vas a dejar de lado el ejercicio durante los meses de bajas temperaturas. Este puede ser un buen momento para hacer deportes en lugares cerrados, pero también podés mantener tu rutina al aire libre si tenés en cuenta dos puntos importantes: estar abrigado antes, durante y después del ejercicio; y no dejarte puesta la ropa transpirada cuando terminás (lo ideal sería que te lleves otro juego de ropa).
La alimentación
Cuando llega el invierno, nuestro cuerpo requiere más calorías, y por lo tanto es normal que cambies de tipo de alimentación. Pero esto no significa que tengas que abandonar tu preocupación por la salud. Ante el cambio de estación, lo más recomendable es que visites a un nutricionista. Pero, en principio, es bueno que tengas en mente no dejar de lado las frutas y los vegetales. Opciones como las sopas o un mix de verduras hervidas son ideales para el invierno.
Hacinamiento
Es frecuente que en invierno pienses con terror en el aire frío de afuera. Pero atentos: la presencia de muchas personas en un ambiente cerrado es ideal para la transmisión de enfermedades. No olvides ventilar los ambientes cada tanto para producir un cambio de aire.