Existen 4 formas principales de alergias predominantes en el período primavera-verano cuya presencia con sus síntomas molestos pueden afectar el bienestar y disfrute de nuestras vacaciones o convertir en insoportables nuestra jornada laboral.
Estas formas son, de acuerdo a su frecuencia:
1- Alergias respiratorias, oculares o una combinación de ambas: se deben fundamentalmente a la reacción mucosa exagerada (alergia) a los pólenes típicos de la etapa y se manifiestan principalmente con estornudos a repetición, picazón nasal con o sin secreción acuosa, lagrimeo o secreción ocular y obstrucción nasal mantenida. Sus formas son conocidas como rinitis alérgica, fiebre del heno, conjuntivitis alérgica y otras acepciones médicas o formas clínicas.
2- Alergias a las picaduras de insectos: se manifiestan fundamentalmente en la piel expresándose como ronchas (reacción local). Por ejemplo la picadura de los mosquitos o la anafilaxia (reacción generalizada y con potencial peligro para la vida) que aparece después de una picadura que produce dolor en la zona afectada con la consiguiente dificultad para respirar.
3-. Alergias alimentarias por consumo de alimentos propios de la estación (como por ejemplo los mariscos, pescados, derivados de la soja, y otros): su manifestación más frecuente son las diarreas y los vómitos acompañados o no de rash cutáneos urticariformes (ronchas).
4- Dermatitis por la radiación solar: esta es debida a la exposición excesiva a los rayos solares y no es estrictamente una alergia pero se involucran mecanismos parecidos y fundamentalmente prevenibles.
Estos cuatro grupos de alergias predominantes en esta época del año nos permiten organizar elementos preventivos y de tratamiento (estos últimos siempre en consulta con su médico) a saber:
* Para el primer grupo se recomienda un tratamiento previo a la estación con un método de vacunas desensibilizantes (consultando siempre al médico alergólogo). Reducir al mínimo las actividades al aire libre en horarios tempranos de la mañana (por la polinización), no tender ropas como sábanas y ropa de cama debajo de árboles para que se sequen, no rastrillar las hojas durante la estación del polen, no tener demasiadas plantas dentro de casa y aplicar o consumir los medicamentos recetados por su médico.
* Para el grupo 2 se sugiere utilizar repelentes para mosquitos y zancudos, utilizar ropa holgada larga y de colores claros para que no atraigan a los insectos, evitar lugares con agua estancada, utilizar mosquiteros de tul para dormir en lugares de mucha plaga de mosquitos, evitar consumir dulces al aire libre (donde haya abejas), no molestar o acercarse a los panales, etc.
* En cuanto al tercer grupo se sugiere ingerir pocas cantidades de alimentos alergenitos o no acostumbrados, sobre todo mariscos, y sólo consumirlos en estado fresco o con adecuada cadena de frío, y consultar a su médico al menor síntoma post consumo de los mismos.
* En referencia al grupo 4 se sugiere disminuir la exposición solar en períodos como el medio día y hasta las 16 horas. Utilizar protector solar y anteojos solares así como ropa holgada, fina, de algodón y cubritiva acompañada de sombreros de ala ancha.